El eclipse total de sol de mañana, 8 de abril de 2024, es más que un mero fenómeno astronómico; es un momento de profunda significancia en el camino del hermetismo y la astrología que nos viene sacudiendo perceptiblemente desde hace ya varios días.
Desde tiempos inmemoriales, los eclipses solares han sido considerados momentos de poderosa transformación y cambio cósmico. Es por esto que se entiende que dichos eventos representan una oportunidad para la alquimia interior, una invitación del universo para que los buscadores del conocimiento interior nos sumerjamos en las profundidades de nuestros seres.
Astrológicamente, este eclipse solar caerá en el signo zodiacal de Aries, el primero del mandala, un signo de fuego asociado con la iniciativa, el coraje y el impulso pionero. Bajo esta influencia, el eclipse podría ser interpretado como un llamado a la acción, una manifestación a viva voz para que cada individuo se conecte con su propósito más elevado y tome medidas audaces (pues despertar) para manifestar sus deseos más profundos en el mundo material.
En el hermetismo, el Sol es visto como un símbolo de la conciencia divina, la fuente de toda vida y energía en el universo. Durante un eclipse solar, cuando la luz del Sol es temporalmente eclipsada por la Luna, se dice que se produce una alineación cósmica única que permite el acceso a niveles más profundos de conciencia y sabiduría. Es un momento en el que los velos entre el mundo físico y el mundo espiritual se vuelven más delgados, facilitando la comunión con las fuerzas cósmicas y la realización de la divinidad interior. Algo así como volvernos, de repente, conscientes de que esa sombra que manteníamos a raya también nos pertenece; caer en la cuenta de que somos eso que negábamos.
Yendo al Tarot, podríamos asociar este eclipse con la Torre (o La Maison Dieu), una carta que a menudo se interpreta como un símbolo de cambio repentino, destrucción de estructuras obsoletas y revelación de la verdad oculta. En el contexto de este eclipse solar, La Torre podría representar la ruptura de viejos patrones y creencias limitantes, permitiendo así un renacimiento y una transformación profunda. Así es como este eclipse podría desencadenar eventos inesperados que sacudirían nuestras vidas y nos obligarían a confrontar nuestras sombras internas. Si prestamos atención, este eclipse podría aparecer como una oportunidad para liberarnos de lo que nos retiene y reconstruir nuestras vidas sobre una base más sólida y auténtica.
La energía de La Torre nos recuerda que a veces es necesario que las estructuras existentes se derrumben para que podamos construir algo nuevo y más resistente. En lugar de temer los cambios que puedan surgir durante este eclipse, podemos verlos como oportunidades para el crecimiento y la evolución personal.
En este sentido, el eclipse será una oportunidad para la introspección profunda, la meditación y la práctica espiritual. Será un momento para soltar lo que ya no nos sirve, para abrirnos a nuevas posibilidades y para afirmar nuestro compromiso con el viaje del alma.
Nos deseo que cada uno de nosotros pueda aprovechar esta ocasión única para elevar nuestra conciencia, trascender nuestras limitaciones y alinearnos con la voluntad divina del universo.
MEK